Cuarta entrada dedicada al significado, apodos y curiosidades varias sobre los números del bingo… ¡Y no sabéis lo que estamos disfrutando! Encontramos en los buscadores mil y una curiosidades e historias completamente rocambolescas.
Significados y motes del número 4:
- La cama
- «Knock at the door»
- El número perfecto
- Originalidad, belleza
- Envidia
Hoy venimos a analizar con profundidad el número cuatro, número par resultado de elevar el dos al cuadrado o de multiplicarlo por sí mismo. El cuatro además es un número con una gran carga filosófica, os lo explicamos: El universo se puede medir en cuatro dimensiones (imaginaos un cubo tridimensional, con su altura, su anchura y su profundidad y ya tenéis las tres primeras dimensiones, si añadís el paso del tiempo para el cubo ya tenéis su cuarta dimensión). Por eso hay una corriente de creencias entorno al significado de este número y su capacidad para estar en todas partes. Si os paráis a pensar medimos en gran parte nuestras vidas en torno a esta magnitud: cuatro puntos cardinales, cuatro estaciones al año, cuatro elementos básicos en la tierra (agua, aire, fuego y tierra), las cuatro fases de la luna (nueva, creciente, llena y menguante) y por supuesto cuatro esquinitas tiene mi cama: ¡La Cama es el apodo del número cuatro en el bingo!
Esta vez se trata de una asociación fácil de entender, hay multitud de objetos con cuatro patas a nuestro alrededor y de todos el más querido por todos seguro que es nuestra cama. Sillas, mascotas peludas, mesas y ruedas de automóviles, todos vienen en grupos de cuatro.
En el Bingo Británico, que tanto nos gusta consultar ya que nos enteramos de cosas muy curiosas, el cuatro es conocido por el sobrenombre de «Knock at the door» (llama a la puerta), simplemente porque al pronunciar «number four» la voz del bingo se responde con esa coletilla porque rima.
En otros juegos de azar el cuatro también es un número importante. En la baraja española cuatro son los palos (oros, copas, bastos y espadas al igual que con los naipes de la baraja francesa (corazones, diamantes, picas y tréboles). O en el parchís, donde hay cuatro colores de fichas. O en el Mah Jong (en su versión original, que no el solitario que conocemos aquí) hay cuatro jugadores y cuatro copias de cada ficha (salvo unas pocas excepciones).
Si vamos a buscar la vertiente más mística del cuatro, los Pitagóricos opinaban que era el número perfecto y que por tanto era el que representaba al ser supremo, a Dios. Para los entendidos de la numerología tampoco es un número cualquiera, puesto que encarna la mayor estabilidad, la mente práctica, el espíritu científico, la perseverancia, la responsabilidad… ¡Casi nada! Y si lo que consultamos para caracterizar este número es la teoría del eneagrama, que engloba las personalidades humanas en nueve eneatipos en los que se repiten ciertas características, el cuatro es el número de los amantes de la belleza, de aquellos que adoran sentirse únicos y originales y cuyo punto débil es la envidia. ¿Te sientes identificado, eres un cuatro?
Nosotros, para despedir este variado análisis sobre distintos significados del cuatro en nuestras vidas, nos quedamos con el símbolo de la suerte por excelencia y del hallazgo de lo imposible: El trébol de cuatro hojas.
